Cualquier
parecido con una crónica es mera coincidencia. La realidad no es un
relato sobre lo que pasó, y ni siquiera sé bien lo que paso... me
perdí charlas, talleres, fiestas, encuentros, polvos y
conversaciones. Pero estoy tan llena que he vuelto a esta dieta baja
en viscitudes corporales que me impongo para que no me duela tanto
todo (el alcohol, el cariño, las confidencias, la confianza, el
nitbus, la falta de espacios para encontrarnos, la calle, la vida...)
Así que en lugar de pasar la tarde perreando me dediqué a pensar en
el postporno...
1. el
postporno, ¿será esto?
A medio camino
de estas jornadas aniversario de Post_Op, me urge contar lo que
siento este domingo en el que las perrakas están hace horas
disfrutando del aperitivo Post_opero. Difícilmente mi cuerpo se
desplace hasta allí, no sólo por la lejanía geográfica, sino por
la lejanía energética: no me llega el power para ir a un
escenario estéticamente más post_apocalíptico que mi paisaje
cotidiano pero en donde me siento igual de post_apocalípticamente
desolada emocionalmente.
Si hay algo que
me recordaron estas jornadas es que la revolución era follar
con las amigas, y era es
pretérito imperfecto y no gerundio. Hace un tiempo que los
fluidos solo ocasionalmente fluyen más allá de monogamias y
alianzas dialógicas. Probablemente porque, como bien explicaron ayer
mis admiradas Quimera Rosa, “se necesitan unas condiciones para
hacer una orgía”.
Quizás se estén creando en el instante en que
escribo este comentario, y entre el fuego y el nublado no alcanzo a
vislumbrar que soy yo la que no está en condiciones.
Soy una de esas
que cuando se le vacía el vaso de vino empieza a verlo todo negro,
una especie de pesimista anónima que diría David Priego. Pero no
puedo evitar decir que ayer me fui con la certeza de que si hay algo
que sabe hacer papá Estado es atravesar los cuerpos con la
interpelación violenta. Porque cada vez que nos encontramos con un
micrófono delante es más urgente resaltar la necesidad de las redes
y denunciar la brutalidad con la que nos marcó para siempre el 4F
que abocarnos despreocupadamente a lo que hace diez años llamamos
pornoamigamia.
Desde este
lugar, leo el Akelarre Cyborg de las Quimera Rosa como una promesa de curación poético-política.
Porque en el aquelarre lo revolucionario no es follar, sino producir conocimiento a través de una performance colectiva. En su
charla sobre postporno y brujería las Quimera hablaron sobre el
aquelarre como espacio performativo de unas prácticas ajenas a los
binomios y la relacionalidad normativa que construyen cuerpos cyborgs. Y si hay algo que necesitamos
para renacer de las cenizas son otros cuerpos, otra manera de
entenderlos y de articularlos.
2. el
postporno también es esto
Allí
estuvieron para recordarlo XIRI TARA NOIR+PARAFILICAS + Rosario
Gallardo+Melanzane Connection + Mery Varó + Dyskrasia con su perfo.
Otro lenguaje, otras cosas por decir, otras intensidades. En esta
familia monster, Annie Sprinkle es la abuela, Beto Preciado el padre,
la manada las hermanas y las nuevas generaciones las
cachorrocerdas.
Lucía Egaña
dio el viernes una extasiante charla sobre tecnología
transfeminista. Mucha gente en karcelona se viene currando hace
tiempo una comprensión de la tecnología desde el feminismo
sexualizado, pero a mi me fascina la ironía lúcida de los
argumentos de Lucía para construir un punto de vista transfeminista
de la tecnología.
Más de una se
quejó de que se leyera en unas jornadas de tal calibre, pero a mí
me encantó. Si el postporno se construye también a través de la
escritura, alguien tendrá que practicar la paciencia (y el goce) de
leer. Que a las brainlovers nos gusta chuparnos el código es
bien conocido... Os aseguro que una buena chupada de cerebro genera
tanta adrenalina como una buena chupada de coño.
El viernes Masa Crónica
dio la charla “Desmedidas. Una exploración de la percepción
corporal”. Las gordas pisan fuerte y vienen a reivindicar la
problematización del deseo. Gran subidón escuchar a la Lucre
reclamar una mirada de la gordura no como reclamo identitario, sino
como replanteamiento del deseo en tanto chivo expiatorio de cualquier
acción.
“Cuidado con el deseo”,
dijo una vez Beto Preciado. El deseo es el refugio de toda
justificación, hasta de la más radical. “Hago lo que me sale del
coño” es una especie de reclamo libertario. Bakunin se retorcería
en su tumba. Claro que Bakunin no tenía coño. De todas maneras,
hacer lo que a una le sale de sus orificios corporales no es señal
de libertad más que en una sociedad en la que el individuo es la
unidad última de referencia, la célula madre de toda existencia.
En
este contexto, replantearse el deseo no sólo es una necesidad
urgente en la lucha contra el patriarcado y sus tentáculos de orden
y vigilancia, sino una de las más difíciles tareas que nos
podemos proponer.
De ahí que para mí uno
de los momentos más frescos de las jornadas haya sido escuchar a
Masa Crónica interpelar a la audiencia con algo así como “si
mis pliegues y mis poderosas nalgas no están en el imaginario de
vuestro deseo, es que el transfeminismo tiene que replantearse la
construcción del deseo”. Aclarar que la frescura para una persona
que no cree ya ni en su propia sombra es un valor muy preciado.
Cansadita estoy de las reivindicaciones identitarias, de poner
énfasis en la diferencia y no en sus efectos perversos.
Las VideoArmsIdea
regalaron poesía desbordante de ironía en su cabaret de cloenda. Si
hay algo que saben las putanas es que la política sin ironía es un
aburrimiento ineficaz. ¡Divinas! Desde aquí me ofrezco de manager
para promocionar este cabaret en el forocoches, el machinazismo se lo
merece.
La Vero nos habló de la
prostitución desde las desigualdades del capitalismo y nos hizo una
retrospectiva de la lucha de las trabajadoras sexuales por la
autonomía.
Siguiendo esta alteración
cronológica de las jornadas, cómo no hablar del regalo sorpresa de
María Perkances, que estuvo horas metida en una caja hasta irrumpir
en el escenario como solo ella pueda hacerlo, desparramando un Happy
Birthday Post_Op que haría las delicias de John Waters... No
sabemos muy bien qué es el postporno, pero si conoces a la Seis
Pisos no necesitas preguntártelo.
3. el postporno era
esto
Beatriz Preciado se dejó
ver via Skype, con la peluca y el bastón que lucía en la Maratón
Postporno que organizó en el Macba hace diez años. Cómo olvidar la
aparición de la Majo con su carrito de la compra lleno de
complementos que llevaron al paro a los dinamizadores que Beto había
invitado al taller de postporno que acabó en orgía televisada.
Una cosa que me quedó
clara en este ejercicio de escribir la propia historia que fue el
aniversario de Post_Op es que no hay nombre que nos haya atrapado
definitivamente. Postporno, queer, tranzmarikabollo, manada, perras,
brujas, son nombres circunstanciales según alianzas contingentes en
esta lucha contra las miserias del patriarcado que tan bien rapearon
las Battonz al final de la jornada.
4. el posporno
(también) somos nosotras
Y entre tantos recuerdos y
reencuentros se creo un terreno fertil para la conciencia de la
propia historia. Desde allí disfrutamos de la hilarante Comida de
coño a las Post_Op que hicieron las Medeak. Si hay un colectivo en
estos últimos diez años que ha utilizado sabia y valientemente la
performatividad y la crítica como estrategias políticas es Medeak.
Brillante la charla y el video en el que nos cuentan cómo eran antes
de conocer a Post_op.
Reforzando la conciencia
de que el transfeminismo es necesariamente reticular, las ORGIA
dieron la vuelta a la tortilla al replantear al jolgorioso público
las preguntas que hicieron a Tatiana Sentamants en su conferencia
sobre “Redes transfeministas en el Estado español”, dentro del
seminario Genealogías feministas en el arte español: 1960-2010,
en el Reina Sofía. Allí el cumpleaños se transformó en asamblea.
Del debate me quedo con la
discusión sobre las relaciones entre los colectivos feministas y las
instituciones. El argumento de Medeak me parece el más acertado
porque es encarnado. Ellas trabajan en la calle y en la
institución pero no a nivel individual sino colectivo, en red. No
vampirizan la institución, la resignifican. Porque la institución
somos nosotras. Institutions_R_Us. Todas vivimos de y en el
capitalismo: desde las funcionarias hasta las okupas. La diferencia
no está sólo en el sueldo y la precariedad, sino desde qué lugar y
de qué manera nos articulamos en el anhelo de mundos vivibles.
5. el postporno quizás debería
ser esto
Quedan en el tintero las
ganas de volver a encontrarnos en un espacio más cercano, en algo
que se parezca más a un aquelarre cyborg. Un lugar donde poder
hablar de esas cosas que no se entienden desde una cámara, donde
performar esa nueva relacionalidad sin audiencia, donde habitar esos
otros cuerpos. Porque, como está el patio, para romper las fronteras
entre público y privado con eficacia hay que hacer que el público
se saque la camiseta y deje de ser público. O mejor, que no lo sea
nunca. Para volver a fluir necesito que el ruido de nuestros cuerpos acalle el
murmullo de la audiencia porque no hay audiencia. Ese noise con olor a caballo sudado quiero.
6.
que postporno ni que perra muerta
gracias
a majo y elena por este regalazo, por darnos la oportunidad de estar
juntas una vez más, por contarnos su/nuestra historia con esa
alegría.
gracia
a beto porque sin su confianza y su tozudez para crear redes el
postporno hubiera sido aburridísimo, y nosotras quizás no nos hubiésemos articulado en esta afirmación de nuestros cuerpos. gracias a virginie porque sus palabras nos enseñaron a
vivir sin miedo, y con miedo no sólo no puede haber postporno sino que la vida es invivible.
gracias
a desi, la patri y la bibi por estar. a la miriam por escucharme, siempre. a la itzi por recordarme que las hermanas pueden
separarse sin dejar de amarse y seguir andando el camino de la mano
(yo también deseo ese sofá
familiar en donde todo se disuelve, y entiendo con tristeza tu
claridad con las cronologías... sí, oh-kaña fue después de lima,
tienes razón).
a
las orgia por no tener miedo a las tesis doctorales y estar cada vez
más buenas a pesar de la academia. a las medeak por su valentía y
lucidez. a las putanas por el reencuentro y por todo lo que me
hicieron reir en su cabaret. a las cachorrocerdas por explorar
dándolo todo.
a
la perkances porque sin ella el cyborg sería una aburrida metáfora.
a la diana porque ha accedido gentilmente a que le haga una
vaginoplastia en el hombro sin anestesia si esta semana no viene a
verme. al andy porque siempre está para echar un cable. a yan y ce
porque me ayudan a volver a confiar en la vida. a namenlosen, produx
y lxs niñxs porque cada vez que estamos juntas me siento otra vez en
casa. a la flori por transportarse hasta allí a través de la
materia (total, ¿qué prisa hay?).
qué
lindo lamernos así el coño... ni postporno ni perras muertas, estamos de parranda.
8 comentarios:
Un placer! Me encanta la no-crónica!
gracias por el relato!
falta el domingo,..que estábamos todxs sin camiseta. No había cámaras pero si mucha intensidad. un placentero akelarre.
ce
gracias a ti preciosa por estas chupadas de coño !! ole !! no pierdo la esperanza y cuento con tu saber para mis jornada en donosti !!
Maravillosa no-crónica.
Un placer leerla:"buena chupada de cerebro, ou yeah".
Sublimes 10 años de Post-Op.
Un abrazo
Au au au..quiero la crónica de es
e aquelarre! Aquí volviendo de mis baños romanos renacida...
Muaaa
A tus órdenes,divina
gracias por el relato. Miauuuuuu tenemos morriá de todxs. Las Battonz estan de resaca feliz
muchos besos
ideadestroyingmuros
morriña...queria decir...
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